La tercera entrega de nuestro trepa muros favorito acaba de estrenarse por todo lo alto: por un lado logra batir todos los récords de preventa de entradas (superando incluso a Vengadores: Endgame) y por otro crea una película épica donde se cierran casi 20 años de películas de Spider-Man.
¿De qué va?
Los sucesos de Spider-Man: Sin camino a casa suceden poco después del desenlace de Spider-Man: Lejos de casa. J. J. Jameson, periodista del Daily Bugle, hace público un vídeo de Mysterio donde éste revela al mundo que es Peter Parker quien se esconde bajo la máscara de Spider-Man. El día a día de Peter se vuelve del revés y decide pedirle ayuda al Doctor Strange. Sin embargo, algo sale mal y el hechizo que debía hacer olvidar a la gente la identidad de Spider-Man, abre las puertas del multiverso.
Spider-Man: Sin camino a casa es una montaña rusa de acontecimientos donde apenas tienes un segundo de descanso. Y sí, te da todo lo que promete y mucho más. La película es divertida, emotiva y además está cargada de acción, cerrando de manera espectacular esta trilogía que explora los años de juventud de Peter Parker hasta alcanzar su madurez y convertirse en el héroe que todos conocemos. Aunque a partir de aquí se abren infinititas posibilidades para continuar la historia en futuras entregas (ya sea dentro del MCU o del spiderverse que Sony está construyendo) de momento parece que solo está confirmado que Tom Holland volverá en una nueva trilogía de la que aún no sabemos nada.