Hoy día Robert
Rodríguez parece estar de capa caída pero hubo una época donde cosechaba
bastantes éxitos de taquilla, y más teniendo en cuenta que sus filmes se
rodaban con cuatro duros. De este modo el director mexicano se convirtió en un
ejemplo a seguir para jóvenes aspirantes sin recursos. El realizador debutó en Sundance en 1993 con El
Mariachi, película que abre su saga del pistolero vengador y que es un
homenaje a Sergio Leone y el Spaguetti Western. ¿Quieres saber un poco más? Pues sigue leyendo.
El
Mariachi
Un joven mariachi, acompañado únicamente de su guitarra, llega a un pequeño pueblo de México. Allí es confundido
con Azul, un criminal que lleva consigo una funda de guitarra repleta de armas. El
Mariachi se ve envuelto en una guerra de bandas mafiosas donde todos quieren
liquidarle.
Con un equipo
prestado y 7.000 dólares en su bolsillo Robert Rodríguez se dispone a rodar su ópera prima. Sus
constantes trucos de cámara y su habilidad a la hora de realizar el montaje
consiguen suplir con creatividad la falta de presupuesto. El ejemplo más claro
es que sin rodar una segunda toma y cambiando constantemente la angulación de
la cámara la película parece mucho más grande de lo que en realidad es. Respecto al sonido, los actores grababan primero la escena ante la
cámara y luego repetían sus frases junto al micro. Al tener pocos
diálogos era fácil de sincronizar. En cuanto a la fotografía, Rodríguez aprovechó para iluminar con unas lámparas de la ferretería en la que
trabajaba.
La película les gustó
tanto a los de Columbia Pictures que se hicieron con los derechos de
distribución para Estados Unidos, de modo que la película consiguió recaudar más de dos millones de
dólares. Además se hizo con el Premio del público en el Festival de Sundance y
el galardón a la Mejor ópera prima en los Premios Independent Spirit.
Desperado
La venganza del
Mariachi continúa. Para él, matar se ha convertido en su forma de vida y no
se detendrá hasta acabar con toda la organización a la que pertenecía la banda que
asesinó a su amada. Bucho es su líder máximo y controla un pequeño pueblo gracias
al tráfico de drogas. Sin embargo El Mariachi conoce a Carolina, una joven del
pueblo que hará que se replantee su dejar su vida de asesino.
En 1995, con algo de
pasta bajo el brazo y con Antonio Banderas como nuevo protagonista, Robert
Rodriguez afronta su segunda película: la secuela de El Mariachi. Desperado es
una imaginativa gamberrada de Robert Rodríguez que mezcla el Spaguetti Western
de Sergio Leone con los elaborados tiroteos de las películas de John Woo. El
reparto se completa con Salma Hayek, Joaquim De Almeida, Steve Buscemi y el
propio Quentin Tarantino. Carlos Gallardo,
que interpretó al Marichi en la película original, hace un pequeño cameo como uno de los compañeros de fatiga del personaje de Antonio Banderas. Partiendo de un
presupuesto de siete millones de dólares, Rodríguez consiguió recaudar más de
veinticinco, volviendo así a demostrar su audacia.
El
Mexicano
Se avecina una
revolución en México. El capo Barillo apoyado por el general Márquez quiere dar
un golpe de estado y derrocar al presidente.
El golpe está apoyado por la CIA, que pretende asesinar también a los
golpistas una vez termine la revuelta.
El encargado de mediar esta situación es el excéntrico agente Sands, que
intentará sacar el mayor rédito posible de la operación. Para ello contratará
los servicios de El Mariachi, sabiendo que éste desea la muerte del general
tras haber asesinado a su familia. El Mariachi tendrá que decidir qué es más
importante para él, si la venganza o la libertad de México.
Once Upon a time in Mexico (Érase una vez en México) es el título original de la cinta, en homenaje al cine de Sergio Leone. Pero como los españoles somos como somos, le pusimos el título que nos salió de las narices. Tuvimos que esperar hasta 2003 para que Rodríguez se decidiese a rodar la tercera entrega, aunque Quentin Tarantino ya le sugirió hacerlo durante el rodaje de Desperado. Sin duda la más
ambiciosa y épica de la saga. Rodar rápido y barato siguen siendo las
constantes del cine de Rodriguez. ¿Lo mejor? Sands, el personaje interpretado
por Johnny Depp. Su carisma eclipsa al resto del reparto. Además de Banderas, Hayeck y Depp se incorporan al elenco Mickey Rourke, Willem Dafoe, Eva Mendes, Rubén Blades y... Enrique Iglesias (emoticono de terror).
Quizás la genialidad
artística de Robert Rodriguez no pueda compararse con la de su amigo Tarantino,
pero su manera de rodar y esas ganas de pegarle una patada a la industria y
crear un nuevo tipo de cine demostrando que con apenas presupuesto puedes hacer
películas notables es un ejemplo a seguir por parte de los que de una u otra
manera nos dedicamos al mundo del cine. Nos despedimos con la ya mítica Canción del mariachi interpretada por Antonio Banderas y Los Lobos.